A Lars también le gusta mucho mordisquear las plantas de mi mamá.
Y no sólo se entretiene destruyendo al ficus sino que también ha atacado despiadadamente con sus afilados dientes al filodendro.
Tercera Parte. Bolivia, Rurrenabaque: Laguna de Patos
Hace 16 años.
3 comentarios:
Por lo visto Lars es un demonio hecho gato...Pero igual es lindo...
Bruja, mi niño se llama TRAVOLTA, no Elvis. Toy chata, ando casi gateando del cansancio, ya es definitivo, el sábado salgo de mi casa. Un abrazo . Y gracias
Otra cosa, otra vez estoy tomando café pero mucho, demasiado.... hay una nueva maquinita por aqui y caí otra vez...
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